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14 feb 2012

Le vi, andaba sonriendo por ahí...

Esta es una nota post-mortem frente a una realización que recuerdo con algo cercano al cariño en esta amigable noche de invierno.

Hace ya un par de meses, me llegó una invitación automática para unirme a LinkedIn (sí, ahora soy suficientemente vieja para tener un perfil a mitad vacío y...un contacto!). La invitación venía del Spica, porque mi correo electrónico seguía en su lista de contactos (lo cual no tiene nada de extraño, yo nunca he hecho una limpieza de los contactos hotmail). De todas maneras, esto es simplemente el contexto y sus detalles no importan.

Así pues, me uní a su red, esperando encontrar algo en su perfil que responda a mis curiosidades básicas.
Y abro su foto de perfil. Ahí estaba. El mismo cabello que yo amé, la misma frente ancha, la misma boca, la forma acorazonada del rostro que durante tanto tiempo gasté en mi memoria. Pero desde el fondo de su mirada digitalizada, no había nada para mi. Nada que yo pudiese reconocer. Nada que dijera "Soy Spica, y aquí estoy".

Y lo único que me pude decir, a solas en mi casa frente a la frialdad de esa mirada que desconozco, fue "Guau. Yo amé a ese hombre". Y me invadió una auténtica tristeza.Y sí. Debo admitir que ha pasado mucho tiempo (terminó así) y que para ese entonces era mucho más joven y ya no soy la misma, pero yo creía en él, en nosotros. Creía en esas posibilidades.

Sigo creyendo que todo es posible. Y si bien no he aprendido a olvidar y dudo que alguna vez lo consiga, sé que nunca más pensaré en él a la hora del té. Ni a ninguna otra hora. Estoy anestesiada de él para siempre. Creo que es esto a lo que llaman "olvidar". Pero es un mal uso de la palabra. Estas cosas no se olvidan nunca. Simplemente dejan de doler.

El invierno te tiene apretada hasta la fibra mujer,
mientras caminas contra el viento.
Ego al aire, ego al frío, campanadas de la muerte.

Nox.

13 abr 2010

Ahora, lo de dentro.

Paraísos perlados.
Secuestrada voluntariamente en un mundo nacarado al que se entra solamente si volteo los ojos hacia atrás.
¡Qué bueno que los ojos no olvidan lo que brilla!
Coros cantan.
Me traga la tierra y me llena la boca de cristales salados.
Vengo del mar, venimos del mar, y a veces se nos escapa en el sudor o en el llanto.
Abstracción de sonidos y de letras,
Palabras que no tienen hilos ni fueron bordadas por nadie.

Fuego sobre el tejado.
Lluvia en la habitación. Seguramente la misma que se detiene en tus días.
Laberintos de hojas plateadas, danzas con el viento.

Cabeza perpetuamente llena o perpetuamente vacía.
Pulmones de tabaco y dedos de papel.
Ganas de sonreír, y a veces ganas de permanecer seria.
Agito un rompecabezas en su caja y al abrirlo la mayoría de las piezas ya han encajado solas.
Nostalgia y melancolía ronrroneantes, basta acariciarlas y adormecerlas.

Y la lluvia que sigue cayendo en la habitación.

8 mar 2010

Ad...iós o el relato de una realidad inexistente


Mañana, esta noche quizás he de partir.
Y será para no volver...para no volver jamás...jamás.
Pasarán milenios y edades y eternidades y yo no volveré.
Rodaremos de mundo en mundo
por toda la inmensidad de los cielos
y no volveremos a encontrarnos.
Y aun si nos encontramos aquí mismo,
una y otra vez, no sabrás quien soy yo,
ni yo te reconoceré.

Porque solo se encuentran los que se compenetran:
los que vencieron la barrera de la separación,
los que se adivinaron y sacrificaron,
unos en aras del otro
los miles de egoísmos del ser.


Alberto Masferrer

La última estrofa puede ser ignorada por el lector.

Y a tí, muchas gracias. Sobretodo por hacerme suave el instante.

Nox.

18 feb 2010

Dis, il fait bon ce soir

Salgo a pasear por las calles, dejando que mis pies me lleven por paisajes laberínticos, con el sol acariciándome la nuca. Susurran los profetas por debajo de la tierra y en el canto de las aves, escúchalos! Los secretos emergen de sus escondites.

Extrañar es un acto cambiante, inestable, camaleónico. Siempre con velocidades distintas, sentidos distintos, fuerzas distintas. Azul profundo y revuelto en algún lugar del tiempo, contemplando en los espejos caminantes el reflejo de las estrellas que llueven sobre sus pestañas.

No One Like You by Scorpions on Grooveshark

Nox.

29 ene 2010

Sí, acepto.

No tengo idea de la dimensión de las cosas, de las transcendencias inminentes que viven en la médula de los instantes.

Aceptando la invitación a un café un jueves, acepté una cerveza, el encuentro de mi soledad con la suya, la sonrisa que me dirigió, el trance pasional pasajero, las vueltas en círculo del destino y la coincidencia, su cuerpo en el mío, mi cuerpo sin el suyo, el amor.

Lo importante no es, como se cree en la superficie, leer lo que está en letra chiquita, sino leer lo que está entre líneas.

Lo importante es que la palabra amor pierde su semantismo y se transmuta en mil formas distintas. El resto no necesita ser contado ni comentado.

Nox.

6 ene 2010

Lo que me falta

es tener la voluntad de imponerme.

Tengo miedo. Aunque racionalmente prefiero silenciarme, existe un sentimiento rugiente dentro de mí (celos?), esperando que yo deje de ignorarlo. Yo lo construí. Es mi culpa y por lo tanto mi responsabilidad.

Mientras tanto busco en cafeínas e insomnios alguna manera de mantener mis ojos abiertos: siento que si los cierro voy a ver todo derrumbarse a mis pies, en un remolino desgarrador, y que al final mis manos sólo tocarán polvo. Los fantasmas se ven pero no se tocan.

Sin embargo logro encontrar paz, conmigo y contigo.

Te amo. Por favor no respondas, me dijo.

Y no respondí.

Nox.

5 nov 2009

Piel y abismo

Mi piel se revuelve bajo recuerdos inquietos entre paz y pasiones. Deseo. Te.
La libertad se extiende sobre tu cuerpo como el frío sobre mi soledad. Tímida pero soberbia se pasea desnuda por detrás de las cortinas, pero yo ya no la miro como antes, antes sólo hubiera mirado sus ojos y ruidosamente le hubiese ofrecido una copa o un cigarrillo. Ahora la miro de hito en hito, sin abstraer ni un solo centímetro de su cuerpo desnudo, y cuando la beso le cuento cómo la galaxia entera se alojaba en mi ser al sentir tus manos sobre mi ombligo cuando nuestras pieles se entendían tanto...

Nox.

22 oct 2009

Fumando espero

Fumando Espero by Carlos Gardel on Grooveshark
Dame el humo de tu boca
Dame que mi pasión provoca
Corre que quiero enloquecer de placer
Sintiendo ese calor
Del humo embriagador
Que acaba por prender la llama ardiente del amor

Siempre tan pertinente. Ahora que otra vez dejé de fumar. El tabaco me lleva inexorablemente a recordar tu boca de alquitrán.

Nox.

7 oct 2009

Y cuando me tocas

se borran mis pecados.
y ya no existen las calles en contravía.

Nox.

Imagen:"Touch" by DianaCretu @ deviantART.com

22 sept 2009

"Tan vivo sobre el vértice del musgo"

No estoy muy segura de adónde voy con este post. Al comienzo pensaba hablar de la inmaterialidad del amor, que hace que el tiempo no transcurra para él. Y al corazón que es de carne, qué le pasa?
Esta mañana Blake me mandó un memo. El cuerpo es la continuación del alma. Verídico. Trabajo en reconstruir esas carreteras porque estaban (y siguen, pero por suerte cada vez menos) saturadas, y la comunicación era cada vez más difícil, incompleta, y poco merecedora de confianza. Siento la necesidad de acercarme al bosque, al mar, a la montaña, a llenarme los pulmones con el aroma que cada uno de ellos despide, abrir los ojos bajo la lluvia o el cielo azul, a dejar que se cuelen en mis oídos los silbidos del viento, el sonido sedoso del agua, el crepitar de las hojas secas. Y dormir acariciada por el musgo. Entregándome así por un instante me deja sentir que mi cuerpo es una puerta abierta al alma. Y puedo dejar que el amor se derrame de mí.
El título lo plageo respetuosamente a Benedetti, que últimamente me ha devuelto la ilusión de la coincidencia.
Nox.
Imagen: "Moss II" by theflex.deviantart.com

10 sept 2009

La historia del niño ahogado

Hace un par de semanas, a finales de agosto, soñé que me encontraba en el medio del mar, azul y turquesa de arenas blancas. Estaba parada en el agua, y junto a mí, estaba el Spica cuando era niño, nadando en círculos frente a mí. De cuando en cuando, se hundía violentamente en el agua tranquila como si algo lo jalara por un pie, y empezaba a ahogarse angustiosamente. Entonces me acercaba yo y lo llevaba a la superficie, tomándolo firmemente por un brazo. La escena se repitió innumerables veces, y yo seguí sacándolo del agua, siguiendo un instinto que no me cansaba.

He tenido ese sueño tres veces más desde entonces. La última fue ayer. Pero esta vez, sabiendo que debía hacer algo para que el sueño no conquistara mis noches, hice el mayor esfuerzo de conciencia que pude.

Y lo dejé ahogarse. Recuerdo haber llorado mientras lo miraba agitarse bajo el agua clara, pero me quedé parada donde estaba. El mar comenzó a tornarse verde, el niño perdía las fuerzas bajo el agua. Entonces las burbujas cesaron, y sangre empezó a subir a la superficie, a dispersarse oscura y espesa hasta el lugar en el que yo estaba.
Me sumergí, agitada por el miedo y la adrenalina. Todo desaparecía y se volvía luz blanca.

Es la primera vez que me siento morir en un sueño.

Nox.

23 ago 2009

El acuario

Una tarde tranquila de sábado, ambientada por el brillo cálido del sol a las cuatro de la tarde. El shinigami da vueltas como siempre en su pecera, luciendo soberbiamente sus aletas y deteniéndose de cuando en cuando para mirarme. Shinigami. Un nombre tan poderoso hizo de mi pez un asesino.
Eso no detiene el arrebato de ternura en el que tomo su reino de cristal entre mis manos para ponerlo sobre mi regazo. Lo observo largo rato, sin dejar de sorprenderme por la belleza y la cadencia de sus movimientos. Entonces me guiña un ojo. Yo le guiño de vuelta. Me invita a seguirlo. Meto la cabeza en la pecera y suavemente me dejo caer en su interior, intentando no perder de vista el camino que me señala el shinigami. Lo sigo largo rato, sintiendo sobre mi piel desnuda la caricia de la corriente.
Aparece una puerta. Al cruzarla el agua desaparece, y sobre mi piel seca se teje un vestido azul profundo. Estoy en el pasillo de un acuario, extasiada por la singularidad de cada una de las criaturas que desfilan a mi alrededor. Me detengo a observar la enorme mantarraya, y sonrío al imaginar la sensación de su piel lisa y tensa. La mantarraya se levanta lentamente y se aleja de mí con cierta dulzura, dejando al descubierto un cuerpo conocido inerte en sobre la arena, tendido boca abajo.

Tenías los ojos abiertos y no dejabas de mirarme. Las anguilas vinieron a cubrir tu cuerpo nuevamente, y cuando se alejaron vinieron las anémonas, y las medusas, y luego las tortugas. Cuando llegaron las centollas me sonreíste y cerraste los ojos. Los hilos de sangre que emanaban de tu cuerpo se retorcían en el agua, y llegaron hasta el lugar en el que estaba yo, del otro lado del cristal, que se trizaba a su tacto.
Otra vez secuestrada en el imperio de mis propios sueños?

Nox.

14 ago 2009

Mujer noble?

Otra tarde le abrió la puerta a una noche llena de soledad. El teléfono suena un par de veces, las voces conocidas del otro lado lanzan repetidas invitaciones a reír y pasarnos de copas. Normalmente aceptaría, llegaría al lugar acostumbrado, saludaría a la gente acostumbrada, reiría con sus chistes acostumbrados y vería sus ojos empañarse progresivamente por los tragos acostumbrados.
Hoy no. Las ideas silenciosas que circulan incesantemente en mi cabeza descienden por el cuello y se instalan en mi pecho, dejándolo con un vuelo de...incredulidad? Pero, por qué lleva ese sabor tan especial? Y peor todavía, de dónde vino?

Justo en el momento en el que había tocado fondo, mi corazón le tendió una barca a sentimientos náufragos. Con ese abrazo me limpiaste, me llenaste de luz, y mis sentimientos estallaron en toda su pureza. Gracias por la paz y la belleza.
Creo en la autenticidad y sobretodo en la pureza de mis sentimientos. Éste en particular anduvo deambulando por mis calles durante mucho tiempo, tropezándose, riendo, llorando, gritando, emborrachándose y dormitando, hasta que yo encontré el lugar al que pertenece. Fue únicamente en ese momento que me sentí en casa. Y no me importó nada.
Sé lo que viene, pero no tengo miedo. Sé que flaquearé como siempre lo hago, pero no dudo de mi fortaleza. Y conozco el poder de lo que siento.
Aunque sigo con ese corazón enorme a cuestas, tengo la impresión de que mi manera de sentir ha cambiado.
Y finalmente no, la incredulidad se desvanece. Soy una mujer noble. Aunque todo esto no tenga especialmente mucho que ver con la nobleza.

Nox.
Imagen: "Free" by jamborzsofi.deviantart.com

12 ago 2009

Tacto


El lenguaje es una piel. Yo froto mi lenguaje contra el otro. 
-Barthes

Nox.
Imagen: "These hands" by cleverness.deviantart.com